Con motivo del 8 de marzo, fecha en la que se conmemora el Día Internacional de la Mujer, Unión Progresista por Librilla se une al resto de fuerzas ciudadanas que denuncian los continuos ataques que el Gobierno del Partido Popular se encuentra realizando hacia los logros conseguidos en materia de igualdad de oportunidades y que afectan principalmente a las mujeres.
Con respecto al ámbito municipal, tanto la Comisión Ejecutiva como el Grupo Municipal de Unión Progresista por Librilla, queremos mostrar públicamente nuestro rechazo a la indiferencia y el desprecio que el Equipo de Gobierno del PP ha mostrado hacia los demás Grupos Políticos en la conmemoración del Día de la Mujer, no convocándolos a ningún acto institucional. Actitud habitual en el Partido Popular de Librilla, que hay que recordar que gobierna sin mayoría, dando muestras así de su verdadero talante excluyente de todas las personas que no se definen abiertamente dentro de su opción política.
Situación lamentable, máxime cuando la actual Corporación Municipal es en la que existe una mayor representación de mujeres de todas las que han existido en Librilla.
Desde Unión Progresista animamos a todas las personas de nuestro pueblo a celebrar el 8 de marzo, reconociendo el trabajo de todas las mujeres que tenemos a nuestro lado, y luchando activamente en la defensa de los derechos que conlleven una auténtica igualdad real entre mujeres y hombres.
Así, la anunciada reforma para este otoño de la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo, que nos retrotrae a las mujeres adultas a los momentos de la transición política considerándonos como seres inferiores e incapaces para decidir sobre nuestro presente y futuro y, niega a las mujeres jóvenes la posibilidad de decisión sobre sus propias vidas, y que va a dar lugar a que se generen un mayor número de abortos inseguros y clandestinos, que van a suponer que arriesguen su propia vida, puesto que la mujer que desee abortar, lo va a hacer en cualquier circunstancia, tenga o no cobertura legal.
Los recortes en la Ley de Dependencia, que estrangulan los pocos resortes de alivio que ofrecía a las mujeres al cuidado de sus familiares, suponiendo una retroceso de nuestra sociedad al esquema patriarcal, a la que hay que unir la del sistema de pensiones, que traerá consigo aún mayor número de mujeres mayores en la absoluta pobreza.
Y no podemos desaprovechar la ocasión que nos brinda este 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer Trabajadora, para recordar los efectos negativos de la aclamada Reforma Laboral del Partido Popular, que abre la compuerta para que la desigualdad campe a sus anchas, respondiendo así a los requerimientos de los mercados y de determinadas instituciones que piensan que la igualdad es un lujo que en una situación de crisis no nos podemos permitir. Esta reforma incrementará las diferencias entre mujeres y hombres en el mercado laboral porque la mayor presencia de mujeres con contratos precarios se incrementará debido a las mayores bonificaciones e incentivos fiscales para las empresas que contraten a mujeres bajo las nuevas modalidades, que lejos de ser una medida de acción positiva, son penalizadoras, puesto que van a dar lugar a mantener a las mujeres en una situación de vulnerabilidad continua ante la pérdida del empleo.